En pleno Algarve, entre la sierra y el barrocal, se encuentra el Pestana Algarve Race, un hotel único en la región. Con vistas al autódromo internacional, un spa perfecto para recuperarse del estrés y el buen tiempo icono de la zona, este hotel le da acceso a un mundo diferente, a la velocidad que desee.
Entre la sierra y el barrocal, el calor que se siente en el aire es disipado por los mármoles pulidos, por el hormigón a la vista y por los suaves tonos de grises y azules que decoran la entrada del hotel. Las clasificaciones quedan en un segundo plano en este espacio luminoso y acogedor, ideal para hacer una parada en boxes durante unos días o incluso para asistir a los numerosas pruebas que animan el circuito más popular del país.
las habitaciones gozan de vistas a la montaña y algunas pueden tener la gran vista a la pista de pilotaje que se encuentra al lado del hotel.
Golfe dos Álamos