Este establecimiento, un hotel independiente, es ideal tanto para ejecutivos en viaje de negocios como para visitantes en viaje de ocio que deseen disfrutar de los encantos de Ljubljana. Es moderno, acogedor, amplio y agradable, todo en uno. El establecimiento está climatizado, fue construido en 2008 y consta de 26 habitaciones, así como de vestíbulo con servicio de salida y recepción 24 horas y caja fuerte. Los huéspedes pueden disfrutar de un refresco en la cafetería, bar, pub o restaurante. Hay instalaciones para conferencias para los huéspedes en viaje de negocios, así como conexión a Internet. Además, se ofrece servicio de lavandería, aparcamiento y servicio de alquiler de bicicletas.
Este hotel, adecuado para familias, está situado en los alrededores del centro de Ljubljana, lejos de la ruidosa vida nocturna de la ciudad, asegurando a sus huéspedes un ambiente tranquilo y un sueño profundo. De todas formas, se garantiza el fácil acceso al distrito central, al cual se tarda no más de 10 minutos en llegar. El casco antiguo de Ljibljana, el castillo de Ljubljana, el río Ljubljanica y el centro de información turística se encuentran a unos 5 minutos de trayecto. El complejo de esquí de Krvavec está situado a unos 20 km del hotel. La línea de autobús nº 9 tiene parada a unos 500 m y la estación central de trenes de Ljubljana dista aproximadamente 2,5 km.
Las amplias habitaciones, dotadas de cuarto de baño, cuentan con amplias y confortables camas, así como con prácticas zonas de trabajo para que los huéspedes se sientan como nuevos y listos para afrontar el día. Todas las habitaciones están totalmente climatizadas con un sistema de control regulable y cuentan con una TV de pantalla plana grande con varios canales vía satélite/por cable, conexión a Internet de alta velocidad y mucho más. Las habitaciones vienen también con ducha, bañera, secador de pelo y cama doble o extra grande. También se ofrecen teléfono de línea directa, radio, caja fuerte y set de plancha. Además, los huéspedes pueden relajarse en su terraza privada.
Monumento icónico de la ciudad. Se alza sobre un pequeño macizo en medio de la ciudad desde 1144, aunque se reconstruyó casi por completo en el s.XV. Puede visitarse libremente y, de hecho, es punto de encuentro habitual para relajarse y tomar algo en sus bares. Algunas de sus exposiciones, los tours guiados y el funicular que se construyó hace unos años para subir.